viernes, 10 de mayo de 2013


Nombre: José Armando García Cruz.
Nacimiento: Antiguo hospital Civil, que ahora se conoce como “Museo de historia y naturaleza” situado en  Santa Cruz de Tenerife.
Lugar de Residencia: Taco.

Edad: 56 años.

-Yesica: Empezamos la entrevista con esta pregunta, ¿Cómo fue el hecho de saber que Franco ha muerto?¿Cual fue la reacción del pueblo?

-José: Pues la reacción del pueblo fue de sorpresa, de momento la muerte de Franco fue un alivio para España, para un cambio mejor, “supuestamente” , cosa que no se ha visto hoy en día, vivíamos un poco mejor porque había trabajo, casa para todos, sanidad, colegios públicos y libros gratis para todos.

-Yesica: Y respecto al nivel de economía doméstica, ¿Qué nos puede comentar?

-José: Pues a nivel de economía de doméstica, respecto a la economía de ahora, con Franco vivíamos mucho mejor, porque todo el mundo en su casa tenía dinero, no eran ricos, pero tenían dinero para afrontar sus gastos y para comer

-Yesica: ¿Crees que era fácil vivir durante la dictadura de Franco?

-José: Se vivía un poco con miedo, no podían estar dos o tres personas reunidas en una esquina porque rápidamente te castigaban con ir a comisaria, también te castigaban si pertenecías algún partido político.

-Yesica: ¿Y qué me puede comentar de los jóvenes de aquel entonces?

-José: los jóvenes de aquel entonces tenían más libertad “supuestamente” porque no podías reunirte con tus amigos en la calle, porque era castigado, porque Franco creía que hacían partidos políticos jóvenes, que se hicieron a la larga, como partidos juveniles pero luego se crearon UGT, comisiones obreras, pero ya con la transición.

-Yesica: ¿Había mucho interés de los jóvenes hacía la política durante la transición Democrática?

-José: Por supuesto que si, claro, hoy en día los jóvenes viven mucho mejor que antes, ahora los ves hasta las tantas de la mañana en la calle mientras que antes solo podían estar hasta las 10.

 -Yesica: A nivel cultural, ¿ vio cambios notables en España?

-José: no, a nivel cultural no, no estaba España para que los chicos jóvenes aprendieran, porque sino los chicos estarían mas preparados con más nivel, pero antes no habían tantos maestros para enseñar a la gente.

-Yesica:¿Por casualidad, llegaste a votar en las elecciones de 1977?

-José: no, porque en el 1977  tenia yo 19 años, antes era obligado a votar, pero no te obligaban directamente, como hoy en día te obliga el gobierno,

-Yesica: ¿Crees como todas las personas de la época de Franco que hoy en día nos vendría bien una dictadura?

-José: yo no he vivido en una dictadura, pero es que una dictadura es dijo y mando, y se hace lo que una persona dice, entonces la mayoría de los partidos políticos desaparecerían, aunque no estaría mal, para que cambiaran los partidos políticos, yo creo que estaría bien una dictadura, pero no tan dura como la de Franco.

-Yesica: ¿En que influyó la transición para ti?

-José: bueno la transición para mi fue libertad, porque podía salir a las 12, a la 1, podía tener un coche, una moto y nadie te paraba y podías vivir un poco mejor, pero creo que esa libertad ya se acabo.´

-Yesica: ¿Dirías que la transición fue una mejora? ¿Vivimos ahora mejor?

-José: mejor mejor, ahora mismo.. bueno si, pero viendo la situación de España en este momento, pues creo que no.

-Yesica: ¿Dónde estabas el día 23 de febrero? ¿El día del golpe de estado fallido?

-José: Estaba en el sillón de mi casa, temblando, porque hacía poco, dos años que había hecho el servicio militar y estaba, perdón por la palabra, acojonado como muchos en España, porque estábamos viendo la vuelta de Franco.

-Yesica: ¿Qué creías que pasaría durante la transición?

-José: bueno pues, me parece que muchos tendríamos que salir corriendo de España, y muchos partidos políticos desaparecerían.


Entrevista a Ricardo González García


Nombre: Ricardo González García.
Nacimiento: Santa Cruz, se crió en La Zarza.
Lugar de Residencia: Desde
los 17 años viviendo en Santa Cruz.
Edad: 75 años.


P: ¿Cómo se vivía en los tiempos de Franco?
R: Mucha represión, no había como lo que hay ahora, se pasaba “apretadita”, no había muchas cosas, había mucho respeto, que no hay ahora. 
P: ¿Qué noticias se escuchaban de la Península por entonces?
R: Noticias de fuera habían pocas, la primera radio que escuché fue en el año 52, un señor que vino de Venezuela y trajo una; andaba con pilas grandes de Telefónica, y solo la ponía un ratito por la noche para ahorrar batería.
P: ¿Desde qué punto de vista se veía la inmigración entonces?
R: Venir no venía gente, salir si que salía gente, mucha a Venezuela o a Cuba, en torno al año 50 en adelante mucha gente. Aquí solo estaba el que sembraba la tierra, el que la dirigía, y el que tenía que recurrir a pedir.
Mi padre fue a Cuba 2 veces.
P: ¿Alguna experiencia de alguien que fuera a Venezuela?
R: Se hacían mucho dinero, trabajaban día y noche, todos los días para poder mandar dinero a la gente que se quedaba aquí, particularmente las mujeres y los hijos. Muchos vinieron con dinero y pusieron múltiples negocios aquí, bares, restaurantes, etc; traían la experiencia de Venezuela. Se fueron sobre el año 50 y transcurridos 30 años -por ahí- regresaron, de hecho mucha gente todavía vive allí. Tengo un amigo que se casó allá, y viene ocasionalmente, ya jubilado.
En los pueblos la gente mayor, que tenían de 20 a 30 años y que se iban a Venezuela, pedían dinero prestado y se marchaban a Venezuela en un barco que tardaban 3 meses, en comparación a los de ahora que solo tardan 1 semana. La Guardia Civil no te dejaba marchar, en un caso en Las Eras hasta le dispararon a un barco intentando que no se marcharan. De hecho un amigo se quedó sin comida en el viaje, afortunadamente encontró otro barco que le dio provisiones y le ayudó a llegar. 
P: ¿La gente pasaba hambre en aquellos tiempos? ¿Cómo era la educación entonces?
R: Sí, había mucha gente que pasaba mucha hambre, porque no había qué comer, y por otro lado había gente que tenía dinero, pero no tenía qué comprar.
De productos estaban las legumbres, el azúcar, el café estaba muy escaso; de chacina y esa clase de alimentos no había nada ya que no había neveras, si querías comer algo tenías que matarlo en casa, solo se vendía carne de cochino salada o pescado salado.

La educación era escasa, solo estaba la educación primaria, habían dos o tres escuelas, el que estudiaba más, tenía que ser una persona con medios, y tenía que acudir a Santa Cruz o a La Laguna para estudiar. En los pueblos era raro que la gente tuviera medios.
En los pueblos solo te enseñaban las reglas y ya está, y cuando tenías 12 años tenías que ir a trabajar, y con suerte.
P: ¿Como se veía en Canarias el trigo que mandaban de Argentina?
R: Se decía que nos mandaban el trigo que peor estaba, el que les sobraba, pero la gente era lista: Cogían un bidón, lo llenaban de agua, y vertían el trigo. El trigo bichado flotaba en el agua y era el que usaban para dárselo a los animales, el que estaba bueno se hundía, y ese era el que empleaba la gente, aquí en Tenerife había algunos sitios en el que llevabas el trigo tostado y te preparaban gofio.
P: ¿Había mucha represión?
R: Sí, había represión con Franco, a la guardia civil se le tenía mucho respeto, por menos de nada te daban cuatro palos, así que los robos eran muy raros que se dieran lugar.
Hubo un caso sobre unos chavales que eran muy pobres, y le quitaron un saco de papas a un tío de ellos y el hombre cuando vio que le faltaban los sacos de papas llamaron a la guardia civil, la guardia civil –que no eran muchos, 3 o 4 en el pueblo-, y cuando encontraron a los culpables como castigo le pusieron a caminar de un lado a otro del pueblo con el saco del papa al hombro, a modo de que pasaran vergüenza. Cuando el tío se enteró que eran sus sobrinos, fue a la guardia civil a pedirles que perdonaran a sus sobrinos, la guardia civil le empujó -siendo un hombre anciano-.
Eran personas un poco pudientes y el que podía, sembraba judías, papas, etc… Y dinero había poco, había que trabajar. Había poco que pagar porque no había luz, cuando regaban o cosas por el estilo pagaban el agua.
No había gas butano todavía, así que si querían calentarse usaban leña, de hecho se podía comprar petróleo para usarlo de combustible.
P: ¿Cómo reaccionó la gente de tu entorno al saber que Franco había muerto?
R: Ya estaba muerto desde hacía mucho tiempo, la gente se había espabilado de forma previa a su muerte, en cambio, cuando Franco era joven la gente si la hacía la pagaba, también es cierto que muchas veces la pagaron gente que no tenía culpa ninguna. Llevaban un tiempo preparando al rey de forma previa a su muerte.
P: ¿Qué sucesos ocurrieron que inspiraban que iba a haber más libertad?
R: La investidura de Juan Carlos I. Antes, primero solo había ministros, Franco que mandaba, los gobernadores de las regiones y ya.
Después con los Parlamentos y los Gobiernos que hay en cada Provincia, cada uno mandaba independientemente, al contrario que antes, que venía del Gobierno central, ahora el Gobierno Canario manda propiamente aquí.
P: ¿Cómo se vivió el golpe de estado de 1981?
R: Estaba en el Puerto de la Cruz trabajando, ya había televisión, y se veía hasta en los escaparates. La gente en la calle estaba asustada, al ver todo el despliegue militar, y con miedo a que volviera el antiguo régimen nuevamente. Seguimos trabajando normalmente toda la gente, el problema esencial era allá, donde había mayor despliegue militar, y estaba el riesgo de que surgiera un nuevo dictador. No llegaron a tomar el poder, afortunadamente, porque no estaban bien organizados.
P: ¿Cómo se veía la figura del rey Juan Carlos I durante la Transición?
R: Bien, era para cambiar, claramente el gobierno fue mejorando, se presentaba otra forma de vida, había más trabajo, más fábricas, llegaban nuevos alimentos en barco, cosa que no pasaba antes durante la dictadura…
P: ¿Cómo se vivieron las primeras elecciones?
R: Era curioso, votabas y no sabías necesariamente por quién votabas, había altavoces y otros medios de difusión por las calles, iban casa por casa solicitando el voto, te prometían cosas que nunca cumplían…
Y eso hacen todavía.
P: ¿Empezaron a llegar más revistas conforme empezaba la transición?
R: Sí, yo me acuerdo de ir a buscar todos los Lunes colorines y revistas. En principio de periódicos solo estaba Aire Libre, El Día que salía por la mañana y La Tarde que salía de tarde, eran cortísimos, dos páginas, ya que por aquel entonces no llegaban noticias.

 Nombre Entrevistado: Juan de la Rosa 

 Entrevistados por: Jessica Rodriguez de la Rosa
                                Paola Quintero Ramos


Para este trabajo hemos entrevistado a Dn Juan de la Rosa, abuelo de Jessica Rodriguez de la Rosa, quien nos cuenta tanto su experiencia como la de aquellos que le rodearon durante la época de Franco y la Transición. 


1.Qué opinaban tus familiares y personas más cercanas del régimen franquista?
   R: no les gustaban, no lo queríamos porque vivíamos muy mal con él, con el franquismo,  porque había     mucha miseria, no había trabajo, no había nada, no había de comer, ni que ponerse de ropa ninguna, andaba uno descalzo, no lo queríamos ese régimen, pero claro no quedaba otro remedio sino tenerlo porque era una dictadura. No se podía hablar de algunos temas, se veía el miedo y la inseguridad en la gente, y daba temor hacer o decir algo en contra de la política.

 2. Te parecía correcta la forma de gobierno de Franco?
   R: Bueno, algunas cosas me parecían bien, como por ejemplo la disciplina que tenian que tener los jóvenes, pero aveces me parecía  mal porque era un gobierno autoritario que todo lo que decía tenía que entrar por el barro si se decían las cosas teníamos que entrar todos por el aro y claro la dictadura era así, él mandaba sin contar con nadie-

 3. y que me puedes comentar acerca de los jóvenes de aquel entonces?
   R: Pues mira, pasamos miseria mi niña, desnudos sin trabajo, pidiendo, robando para poder comer, robando tomates por ahí para comer,  para conseguir 50 pesetas, no eran 50 euros, fué una época muy mala, nos tenían todo restringido la comida, ellos decidieron controlar los alimentos, la comida era por libreta, que le daban a cada persona algunos alimentos de los productos de primera necesidad por ejemplo, daban litro de aceite para el mes por persona, o medio litro, arroz, azúcar, pan, judías

 4. recuerdas algún referéndum de manera especial?
  R: Sí, cuando la transición de Franco al Rey, ésta fue pacífica

 5. Cómo fue el hecho de saber que Franco ha muerto? Cuál fue la reacción del pueblo?
  R: Pues todo el mundo, unos lo sintieron y otros no, porque claro había muchas personas que lo querían y muchas personas que no lo querían, para muchos fue una alegría y para otros una tristeza. Los que estaban alegres se manifestaron todos a favor del Rey, pero algunos también sentían miedo por que no sabían lo que ahora iva a pasar,  muchos se fueron a sus casas asustados.

 6. Cómo se recibió la llegada de Juan carlos I como rey de España?
  R: La llegada del Rey se recibió con mucha alegría, vimos en la tele de un vecino, ya que por esa época era muy difícil tener un televisor, fue muy emocionante, pues pensábamos que era para mejorar, hubo beneficio porque antes las leyes eran mas duras y había que cumplirlas por obligación, con el Rey se dieron ayudas para medicina y estudios.

 7. Qué papel jugó el Rey Juan Carlos I en todo este proceso?
  R: El Rey unió a todo el pueblo español, a todos los partidos, la gente tenía mucha confianza en él.

 8. Qué diferencias notaste entre el período de gobierno franquista y la llegada a la monarquía de Juan Carlos I?
  R: Libertad, fue lo primero que vimos, que ya podías expresarte de la forma que tu quisieras, se llevaba una vida mejor, La gente tenía ganas de cambiar, teníamos muchas ilusiones y ya no teníamos miedo de ir por la calle, ya se podía hablar de lo que quisiéramos de política sobre todo se veía a la gente alegre. ya no había represión, ya teníamos libertad de reunirnos y de opinar.

 9. La transición fue un cambio brusco?
  R: No para nada, fue un cambio pacífico, lo vivimos con un poco de alegría y pero también con temor,  

10. En qué influyó la transición para ti? 
 R: Bueno, ya tenia libertad para decir lo que yo pensaba, otra cosa era que escuchábamos canciones modernas en la radio. Ya podíamos vivir un poco más tranquilos.


¡Tengo una historia que contar! Jair Ghuneim Orihuela.


Soy Jair Ghuneim Orihuela, alumno de 2º de Bachillerato B del IES Profesor Martín Miranda. En esta ocasión contaremos con las amables palabras de María del Carmen Torres González, mujer nacida en la postguerra, en el inicio del franquismo que se ha prestado a esta entrevista.

Bueno, me gustaría que me respondieras abiertamente, tal y como viviste el franquismo y el cambio que pudiste apreciar durante la Transición española. No estaría mal que nos comentaras, ¿Qué recuerdas de Franco?
De Franco, aún me acuerdo cuando vino a Tenerife, yo era muy pequeñita e iba de la mano de mi tía y de su marido que servía en aquel entonces al ejército de Franco, recuerdo que estaba en lo alto, en un balcón en la plaza del Príncipe en Santa Cruz y todos lo aclamaban. En ese momento no entendía muy bien por qué hacían eso.

Respecto a la comida y productos de subsistencia, ¿Eran de fácil acceso a ellos?
Fueron tiempos de mucha pobreza, sobre todo en el principio del franquismo, yo recuerdo, de ir con una cartilla de racionamiento a buscar comida. Ahora mismo, si lo comparamos con el pasado, da envidia todo lo que tenemos.
¿Cómo vivías el franquismo? ¿Echabas en falta algo?
En aquel momento, había carencias, pero era algo que en mi niñez veía como normal. En ese entonces, mis padres no me permitían salir a la calle, y los juegos eran en familia, junto a mis hermanos. Fue ya cuando conocí a mi marido cuando empecé a salir más.

¿Cómo era la calle durante el franquismo?
Al principio parecía tranquilo, había mucha seguridad, cuando salía con mi padre, se pasaba la mayor parte del tiempo con los brazos en alto, en toda esquina se escuchaba un “¡Alto! ¿A dónde va? Identifiquese”, o  frases parecidas.

Supongo que irías a la escuela ¿Existía alguna diferencia respecto ahora? Los chicos estaban separados de las chicas, ¿Existía diferencia en lo que se estudiaba?
Si estudiaba. Imagino que existirán muchas diferencias de antes a ahora, creo que ahora la sociedad es más culta y abierta y la transición a la democracia, hizo un bien a España.
Si, no estudiábamos en el mismo lugar, niños por un lado y niñas por otro, pero pienso que lo que estudiábamos era lo mismo.

¿Tenían televisión en ese entonces?
No había televisión en mi niñez, fue más tarde, ya una vez casada cuando llegué a poseer mi propia tele. Recuerdo de pequeña pasar por los escaparates y quedarme mirándolas, pensando “Yo nunca podré tener una de esas”. Pero con los años, el Franquismo fue siendo más permisivo, y ya viviendo con mi marido, recuerdo tener la televisión en casa, en ese entonces solo existía una cadena de televisión, “la Española”. Hoy en día es todo un lujo tener todo lo que tenemos dentro de esta habitación, en ese momento era impensable, hay que ver todo lo que ha cambiado el país, que vueltas da la vida.

Avanzando en el tiempo, ya una vez con Televisión, ¿Recuerdas lo ocurrido con Carrero Blanco?
¡Sí, claro que me acuerdo! Estaba viendo la televisión en cuando ocurrió el atentado de ETA, su coche salió por el aire de la explosión tan grande.

¿Recuerdas la muerte de Franco?
Me acuerdo que cuando él murió, el Rey Juan Carlos entró en el poder, pero mantuvo en el gobierno a Arias Navarro, que tampoco duró mucho. Después quien gobernaba era Adolfo Suárez.

¿Votaste en las primeras elecciones democráticas de 1977? ¿Recuerdas a quien? ¿Por qué?
Sí, me acuerdo de ir a votar, yo no sabía nada de política, de hecho, vote porque mi marido me había dicho a quien tenía que votar, que de no hacerlo podía perder el trabajo, así que vote a un grupo socialista, creo que era el PSOE. Ya en ese entonces, estaba legalizados los partidos comunistas en España, que eso con Franco, eran ilegales.

¿Hubo diferencias en el apartado de la comida del franquismo a la transición?
Sí,  ya una vez acabado el franquismo, todo estaba más al alcance de todos, ya no había tanta pobreza, y podías tener “caprichos” que  antes eran impensables.

¿A qué te dedicabas en aquel momento?
Era costurera, también hice algo de peluquería pero vagamente. Principalmente costurera, en casa, pero mi mayor dedicación era a mis hijos, mientras mi marido trabajaba durante el día, yo me ocupaba de ellos.


jueves, 9 de mayo de 2013

Hola, soy Yurena Ravelo García. He aquí mi entrevista realizada a mi abuela Rosario Ruiz Villa,
que nos hablará de su vida junto con otros aspectos del Franquismo y la posterior etapa de la Transición:

http://www.youtube.com/watch?v=7zw_XeT_3hg&feature=youtu.be

Damana Gara Hernández Torres y Carla Rebollo Arnay.



Nos  disponemos a entrevistar al profesor del IES Profesor Martin Miranda José Valdivieso Sánchez profesor de Sociales, con motivo del trabajo final en la asignatura Historia de España. En esta entrevista, trataremos temas desde el franquismo hasta la Transición intentando recopilar lo vivido por el entrevistado en esos años.
P. Como ya sabemos, el Franquismo fue una época muy dura para España ¿Cómo vivió usted esa época?
R. Tuve conciencia de la dictadura a finales de los sesenta, principios de los setenta, la última etapa del franquismo  que, por lo que contaban mis padres, la cosa se había suavizado un poco. Hasta entonces franco había gobernado con mano dura. Recuerdo que un par de meses antes de la muerte de Franco hubo cinco fusilamientos a miembros de ETA y otra organización que no recuerdo.
En el instituto Alonso Quesada organizábamos actividades, no siempre autorizadas, donde tratábamos asuntos relacionados con la oposición al Régimen. De vez en cuando nos reuníamos con gente del partido, es como se conocía al Partido Comunista de España, para organizar, digamos “actividades”.
Me acuerdo del nombramiento del Almirante Carrero Blanco en 1972 o 73 como Presidente del Gobierno y que eso nos desmoralizó mucho porque era el hombre duro del Régimen. Pocos meses después murió en un atentado de ETA, siendo sustituido por Arias Navarro que comunicaría en televisión la muerte de Franco con gran teatralidad: “Españoles, Franco ha muerto”
 P. Imaginamos que fue un gran impacto el fallecimiento del Generalísimo. ¿Cómo vivió el cambio tras su muerte?
R. Yo estaba en el segundo año de carrera en La Laguna, vivía el en colegio mayor “San Agustín” y ese día me había quedado a estudiar para un examen, cuando alguien gritó desde el patio: “Se murió”. Fuimos corriendo al salón de la tele y vimos el final del comunicado de Arias Navarro.
La muerte de Franco me trajo sensaciones contradictorias. Por un lado de preocupación por si las cosas se pusieran peor, por otro de esperanza en que se produjera el cambio. Con el nombramiento de Adolfo Suárez como sucesor de Arias Navarro creo que empezó un largo camino hasta la consolidación de la democracia en España. Fue durante los gobiernos de Suárez cuando se legalizan los partidos políticos y se aprueba la Constitución.
P. Las vidas de muchas personas quedaron llenas de recuerdos vividos a lo largo de esos años, en el caso de usted, ¿hubo algún hecho que le marcara?
R.Marcarme no, pero si hubo un par de acontecimientos que no creo que pueda olvidar.
El curso 77-78, y lo recuerdo porque ese año me casé, fue un año difícil. Con la muerte de Franco la Universidad se convirtió en plataforma de reivindicaciones políticas y sociales. No dudábamos en salir a la calle para reclamar derechos y libertades o, como en diciembre del 77, apoyar las demandas de otros sectores, concretamente una huelga general de la gente de la empresa de transportes (hoy Titsa). El 12 de  diciembre, después de algunas marchas por La Laguna, aparecieron a mediodía unos guardias civiles que  dispararon asesinando a Javier Fernández Quesada en la puerta de la Universidad que da al campus. Yo estaba allí y me impresionó.
El otro acontecimiento fue el golpe del 23F. Trabajaba en un colegio de Somosierra y cuando regresaba a casa hoy por la radio que unos guardias civiles habían entrado en el Congreso. A partir de ahí estuvimos pegados a la radio viendo el televisor hasta el día siguiente. Fueron horas de mucha tensión. Recuerdo que mucha gente pensó, incluido yo, que volveríamos a un estado represivo.
P. ¿Cómo fue en Canarias esas épocas significativas para España?
R. Supongo que como en la península. La gente tenía miedo, sobre todo la gente mayor, la que vivió la guerra y la posguerra. Llamé por teléfono a mis padres y aunque los noté tranquilos me aconsejaron que comprara productos de primera necesidad y bromeamos sobre eso. Al día siguiente había muchísima gente comprando en tiendas y supermercados.
P. En esa época era obligatorio asistir a la mili, salvo algunas excepciones, ¿usted tuvo que ir?
R. No, afortunadamente no tuve que perder 18 o 24 meses de mi vida.
P. ¿Cómo se libró?
R. Durante unos años pidiendo prórroga por estudios. Luego tuve la suerte de que se aprobara una ley por la que el excedente de cupo no se hacía por sorteo sino que parte de ese excedente se daba a los mantenedores de familia. En aquellos momentos ya tenía un hijo y me pude librar.
P. ¿Qué era el excedente de cupo?
R. Cuando un año había más jóvenes en edad para entrar a la mili de los que se necesitaba, a la cantidad que sobraba es a lo que se llamaba excedente de cupo.
P. ¿Cómo era la situación de la mujer en esa época?
R. A finales de los setenta con la aprobación de la Constitución se empezaron a producir algunos cambios favorables a la igualdad de las mujeres y hombres. Recuerdo una ley por la que se aprobó la igualdad de derechos de los cónyuges en el matrimonio, que hasta entonces eran el hombre el que tomaba, legalmente, las decisiones. Esa época fue el comienzo del camino que nos ha traído hasta aquí.
P. Con el cambio tras la muerte de Franco, ¿qué significó para usted poder votar en las elecciones?
R. Fue emocionante. Después de haber luchado por las libertades, haber pasado dos detenciones por participar en actos de protesta una, y por estar en una manifestación que terminó con bolas de goma y piedras la otra, votar fue algo que me llenó de orgullo. Sentí que al final lo habíamos conseguido.
He aqui la entrevista a Domingo López, secretario general de la CGT (La Cuesta) hecha por Shiony Pérez y Kelly Rodeiro. Esperamos les guste.

http://www.youtube.com/watch?v=-ZPuFf3Qu-Y

Tengo una historia que contar de la Transición

Somos Bellahanum Gouzelkhanova y Silvia Jiménez Rodríguez, y Emilio Pastor Sádaba es quien nos ha concedido el honor de responder a nuestras preguntas. He aquí la entrevista:

https://www.youtube.com/watch?v=UwIyX0cWkXw

TENGO UNA HISTORIA QUE CONTAR: LA TRANSICIÓN ESPAÑOLA

Kevin González Bello.


La entrevista se la he realizado a Hermenegildo González Delgado, que durante la etapa de la Transición democrática tenía 27 años. Ha contado sus vivencias y su opinión sobre esa época que se vivió en España y también sobre algunos aspectos referidos al franquismo. 

Entrevista.

¿Cómo se  vivió la muerte de Franco?
A mi, personalmente, no afectó la noticia de que Franco había muerto ya que no estaba a favor de su régimen. Quería, al igual que mucha gente que se produjera un cambio en cuanto al sistema político. Sí es verdad que hubo bastante gente que sintió su muerte, pero como ya dije antes, a mi no me afectó demasiado. De todas formas se vivió a nivel mundial, ya que había muerto un Presidente del Gobierno. Se asimiló mejor porque ya estaba enfermo de hacía tiempo.

Franco nombró como su sucesor a Juan Carlos II, ¿le pareció correcta esa decisión?
Sí me pareció una decisión acertada, aunque tampoco me considero partidario de la monarquía. Me pareció correcta porque todos sabíamos que iba a haber un gran cambio y, además, se iba a tener más en cuenta la opinión de los ciudadanos.

¿Considera importante el papel del Rey en la Transición?
Ha habido muchos momentos en los que el papel del Rey sí ha sido de gran importancia, pero en otros creo que no. Por ejemplo, durante el 23F sí fue relevante, pues consiguió tranquilizar y apaciguar a los golpistas. De resto y que recuerde, no considero el papel del Rey como de gran importancia.

Hablando del 23F, ¿cómo se vivió?
Fue un hecho que afectó a todo el país. Desde que se anunció, todos estábamos siempre pendientes a cualquier noticia, ya fuera en la radio, televisión, prensa... Teníamos miedo,. porque no queríamos volver al régimen anterior. Entonces, el Rey actuó muy rápidamente y por medio de contacto con aquellos que mandaban en cada provincia, se fue tranquilizando la situación . Pero, aunque duró pocos días, fueron unos días de angustia, de no saber que iba a suceder.

¿Qué recuerdas de ese paso a la democracia?
No sabíamos si iba a ser para mejor o para peor. También nos preguntábamos si iba a haber trabajo y si se iba a vivir en las mismas condiciones que con el régimen franquista.

¿Solías formar parte de las conversaciones sobre política en aquella época?
Por supuesto, era de lo único que se hablaba durante esos años. Durante mucho tiempo, en lugar de hablar de otros temas más frecuentes como el fútbol, los toros..., se hablaba de lo que  estaba sucediendo en ese proceso democrático y nuestra opinión con respecto a él. En los bares, por ejemplo, todo el día se hablaba sobre ese tema. No pensábamos más que en lo que podría estar pasando.

Con respecto al franquismo, ¿cambió mucho el papel de la mujer durante la Transición?
Sí cambió, mucho. Con el régimen de Franco la mujer no podía votar en las elecciones generales, y fue a raíz de la democracia cuando comenzó a ser parte de la vida política. La mujer siempre estuvo a la sombra del hombre. Se realizaban manifestaciones para reivindicar sus derechos, y cada vez más se fue introduciendo en el sector del trabajo, que era contrario al régimen de Franco pues durante esa época la mujer debía quedarse en la casa y cuidar del marido y de los hijos.

Cuéntanos algo acerca de su trabajo en aquella época.
Yo era técnico de mantenimiento de ascensores. Entré en 1972 y en esa época cualquier persona buscaba trabajo de un día para otro. Por ejemplo, yo estuve trabajando en una ferretería y me enteré de que en los ascensores se cobraba más dinero. Me fui tal día como hoy de mi anterior trabajo y al día siguiente ya estaba trabajando en la empresa de ascensores. Es decir, en esa época era bastante fácil conseguir trabajo porque habían muchísimas empresas y aunque no se ganaba mucho, tenías un sueldo para sacar a delante a la familia.

¿Era obligatorio el servicio militar?
Sí, no fue hasta hace pocos años cuando empezó a ser de forma opcional, y comenzaron a dar un sueldo a aquellos que estaban en el cuartel.

¿Cómo se vivieron las elecciones de 1977?
Pues la mayoría votamos a favor de la democracia. Se vivieron con muchas ganas, pues la gente quería un cambio y dejar atrás el franquismo. El primer partido que ganó y gobernó en la democracia fue el UCD, cuyo presidente era Adolfo Suárez. 

Bueno, pues hasta aquí la entrevista. Gracias por compartir conmigo tus vivencias sobre esa etapa tan importante en la historia de España.





















"Tengo una historia que contar de la Transición democrática".

ENTREVISTA.
Hola. Soy Noemi Cabrera Rodríguez.. Y el  entrevistado es Santiago Luque de 59 años (pequeño empresario) y a dos mujeres mayores, a las cuales se les ha hecho la entrevista en la calle, para saber sus puntos de vista sobre la situación y qué es lo que se recuerda del momento.

http://www.youtube.com/watch?v=xa5Ro6Kp_nQ&feature=youtu.be

miércoles, 8 de mayo de 2013

Tengo una historia que contar: la Transición

Entrevista realizada por Karen Álvarez Tosco a Pastora Tosco Pérez, nacida el 23 de Septiembre de 1956. Tenía 19 años en el inicio del periodo de la Transición y se encontraba trabajando interna en un colegio de monjas en Santa Cruz de Tenerife.  Nos aportará su visión sobre el momento, cercana a la de los jóvenes de la época, y recordará con nosotros los hechos que marcaron la historia de España.



Tengo una historia que contar.

Somos Raquel Yanes y Nelson Hernández y hemos entrevistado a Remedios Sacramento González, cuya edad es de 85 años. Nacida a finales de la dictadura de Primo de Rivera, nos ha podido contar su experiencia personal sobre diversos temas. Aquí está la entrevista realizada:

 http://www.youtube.com/watch?v=_i-VMn1iT8E&feature=youtu.be

Esperamos que os guste.

martes, 7 de mayo de 2013

 TENGO UNA HISTORIA QUE CONTAR: LA TRANSICION
 
        Mi madre tiene ahora 52 años, nació en Salamanca en el día 19 de Mayo de 1960 y toda su familia emigró a Canarias cuando ella tenía 12 años, es decir en 1972, época en la que tenía un auge importante el movimiento independentista MPAIAC, cuyo dirigente fue el reciente fallecido Antonio Cubillo.
       Sus primeros dos años los vivió en el pueblo donde nació, Santa Marta del Tormes, hasta que una riada desplazó por primera vez a su familia a la capital no regresando después al pueblo, ante la falta de expectativas laborales y recursos.
Ahora que el principal problema  de nuestro tiempo es la economía ¿Cómo se comportaba ésta  en aquella época?
        Existía muchísima pobreza y paro. Yo hasta los 7 u  8 años  vi muy poco a mi padre, porque como éramos ocho hermanos tuvo que emigrar a Francia y a Alemania para  traer dinero a España ya que había un gran índice de paro. La emigración se daba tanto hacia el extranjero, como de forma interna, entre regiones.  De hecho nosotros  nos habíamos ido del Pueblo a la Capital, y después nos vinimos a Canarias, porque le ofrecieron trabajo a mi padre.
        España, en aquellos tiempos, era un país rural y poco industrializado, con un alto porcentaje de analfabetización. 
        Fui oyendo hablar de los bienes de consumo poco a poco, a principios de los 70. La tele  era un lujo que se compraba a plazos y en blanco y negro. Pocos tenían coche. El más famoso el  seat 600 , de reducidas dimensiones que algún vecino lucía con orgullo. Nosotros no teníamos coche, por supuesto, pero si pudimos tener televisión  cuando yo tenía unos seis o siete años. Nos encantaba ver en familia el concurso de "Un dos tres, responda otra vez" y el festival de Eurovisión. Esperábamos ansiosos que el reloj de la "carta de ajuste" desapareciera de la pantalla, para poder ver algún programa y dejar de oír el pitido estridente que emitía.
¿Era fácil el acceso a la cultura y enseñanza?
        Yo fui escolarizada a los cinco años, en un Colegio de monjas y tres de mis hermanas ya lo estaban antes en la misma escuela. La enseñanza religiosa era habitual, porque estábamos en un estado confesional. Que yo sepa todos mis hermanos estudiaron, aunque es cierto que solo cinco de ellos realizaron estudios universitarios.  Mi único hermano (las demás son chicas) también estudió en un colegio de curas. De las más mayores, que finalmente no siguieron estudiando,  recuerdo que hicieron los cursos de la Sección Femenina, y  abandonaron los estudios  poniéndose a trabajar en una fábrica de bolsos (excepto la de más edad, que contó excepcionalmente con la ayuda de mi  tía soltera, que la crió  y cubría  por tanto todas sus necesidades , llegando después a hacer estudios universitarios).
        La religión era una asignatura importante, y además a través de las asociaciones juveniles se fomentaban los principios del Movimiento. De hecho cuando entrábamos en clase nos hacían rezar y pararnos, donde estuviéramos , si llegábamos algo tarde, para escuchar el himno nacional al entrar a clase. Nos ponían en fila, y no recuerdo bien, pero creo que teníamos que levantar la mano y estar muy quietecitos mientras  oíamos el himno . Después, dentro de la clase rezábamos todos los días (creo que dos veces, una al entrar y otra al salir).
        Las monjas nos revisaban diariamente la ropa e higiene e imponían una disciplina estricta que yo en más de una ocasión transgredí, por lo que era habitual verme fuera de la clase castigada. En eso me secundaba una de mis hermanas, que también era algo rebelde.
        El buen comportamiento y sometimiento a las estrictas normas  era muy valorado. De hecho aún recuerdo con orgullo y algo de envidia como una de mis hermanas obtenía por su carácter dócil, aplicado y disciplinado la banda azul que se colocaba a la alumna o alumnas modelo.      
         La educación era diferente para la mujer que para el hombre ya que a este último se le adjudicaba la  tarea productiva, y a la mujer, básicamente, la reproductiva. Se le concedía menor importancia a la formación de la hija que a la del hijo y todo porque se pensaba que su destino era casarse. Por eso, parte de nuestra formación en el colegio consistía en labores del hogar.
        Pese a ello yo accedí al Instituto, con algo de retraso, dados los cambios de ciudad y la pérdida por ello de un curso, y después en el año 79 a la Universidad para hacer la carrera de Derecho.
        ¿Cómo eran las prestaciones sociales en aquella época?
        Había sanidad pública, pero con coberturas básicas. Había vacunas obligatorias que se controlaban a través del colegio . Una de las operaciones más habitual era la  de amígdalas  que era muy bien recibida por los niños, porque después comíamos helado.
        Existían ayudas por familia numerosa (los puntos que se llamaban) y premios a la natalidad . Eran  subsidios familiares.
        Los libros se pagaban, pero pasaban de un hermano a otro, como la ropa. Nosotros siempre estudiamos con beca. En los colegios, se repartía diariamente leche en polvo para alimentar a los alumnos durante el recreo.
¿Cuál era el papel de la mujer?
        En mi familia, que era de  carácter tradicional, dominaban los valores de autoridad patriarcal, si bien, como mi padre se hallaba fuera en los primeros años , la figura de mi madre era la base de nuestra vida. Pero eso no era lo normal.   Pese a no haber accedido a cultura alguna, yo fui a la escuela sabiendo leer y escribir, aunque probablemente tuvieron mucho que ver en eso mis hermanas, que eran mayores que yo. De todos modos mi madre dio siempre mucha importancia a la cultura, y nos compraba enciclopedias a plazos aunque éramos muy pobres.
        Como ya dije antes mi padre estuvo fuera muchos años, por lo que mi madre tuvo que hacer las veces de padre y madre en muchas ocasiones y tomar las decisiones importantes. De ahí que en los primeros años yo no notara el sometimiento de mi madre a mi padre, como mujer, de lo que solo me daría cuenta años más tarde, cuando efectivamente mi padre tomó las riendas de nuestras vidas, y se comportaba como cualquier padre en aquella época, es decir, imponiendo la jerarquía y el sometimiento de la mujer al hombre.  El mismo rol tomaba mi hermano, al que las demás hermanas respetábamos, y admirábamos.
           La patria potestad que ejercía el padre sobre las hijas menores de veinticinco años  suponía que se les prohibía abandonar el hogar sin permiso de sus progenitores de no ser para casarse.
        No obstante, con el acceso a la cultura estos valores empezarán a cambiar.
        Aún así había profesiones a las que no podían acceder. Por ejemplo  hasta los años 70 la mujer no podía ser juez.  La Profesión mejor valorada, de haber seguido estudios la mujer, era la de magisterio o enfermera. De esto estuve yo muy pendiente porque ya de pequeña quería ser abogada, y jugaba a ello con mis muñecas.
¿Qué tipo de juegos  se usaban?
        Jugábamos  al aire libre  en parques o  en la calle donde estaba situada nuestra casa. Como donde yo vivía de pequeña nevaba, el juego por excelencia era la nieve.  A veces no podíamos ir a clase porque la nieve llegaba a dos metros de altura.
        También hacíamos un círculo en la tierra mojada, y con un clavo lo dividíamos en secciones, hasta lograr quitarle a quien jugaba contigo el trozo que le correspondiera.
         Jugábamos  también al pati , a la goma  y a la comba.   Los niños   de mi barrio vendíamos además limonada en un "bar improvisado" hecho con una gran caja de cartón que poníamos en la calle, y nos ganábamos así unas monedas.
Hablas de que viniste a los doce años a Canarias, y que estaba en auge el movimiento independentista ¿puedes hablarme de como lo viviste?.
         A parte del desarraigo que suponía haber dejado a los amigos y a una familia muy extensa en la Península, cuando llegamos a Tenerife, tanto en el Colegio como en el entorno social nos hacían sentir discriminados, por ser peninsulares. Nos llamaban godos, y llegamos a sentir personalmente el rechazo en muchas ocasiones. Además , como vivíamos enfrente de la policía de la Laguna, fuimos testigos de varios atentados y amenazas de bomba. Una de ellas estalló en una sucursal de un Banco, muy cercano a nuestra casa.
        Al entrar en la Universidad, la discriminación ya no era solo por ser goda, sino además por ser mujer. Los compañeros de la facultad no veían aún con buenos ojos que una mujer quisiera estudiar Derecho. Solo eran unos pocos, pero aún se notaba la formación que habían recibido de sus padres.
¿Cómo se veía la Homosexualidad en aquellos tiempos ?
        Estaba prohibida la homosexualidad o bisexualidad. Era por tanto difícil que nadie "saliera del armario". Por ello no se hablaba mucho del tema.
¿Háblame sobre el divorcio? .
No había. Si te casabas era para toda la vida. Si había separación que debía de aceptarla la Iglesia por motivos muy especiales. En el año 81 se dictó una ley que permitía el divorcio, pero para que lo concedieran había que justificar causas muy especiales.
¿Cómo se ejercía  la libertad de expresión?
        No había libertad de expresión. Los medios de comunicación (radio y dos cadenas de televisión la 1 y la 2) estaban controlados . Eran habituales los discursos de Franco. Los periódicos también sufrían la manipulación política.
        Había censura y las películas de sexo se iban a ve fuera ("Más allá de los Pirineos" como se decía) . Al principio poca gente tenía TV.  Existía lo que se llamaban los rombos. Si aparecían los dos rombos blancos  en el margen  derecho de la tele  los niños sabíamos que teníamos que irnos a la cama. De todos modos nos lo recordaba  de noche la familia Telerín, con Cleo al frente que se llevaba a todos sus hermanos a dormir. 
Dices que te gustaba jugar a que ibas a ser abogada. ¿ Me puedes hablar de algunas leyes que llamaran la atención en aquella época, respecto a las que hay hoy en día? .
        Yo entré en la Universidad en el año 79  y me llamaban la atención cosas como el parricidio por honor, o que estuviera penado el adulterio. Se llegaba a los extremos de  que el marido que encontrara a su esposa con otro hombre podía matarla y se consideraba un acto de legítima defensa para su honor. Sin embargo si era ella la que lo encontraba a él solo se le desterraba. Alguna vecina tuvo algún problema con este tema, aunque no recuerdo bien como fue.
            Otra ley que nos sorprendería mucho ahora era la  exigencia de la autorización marital para el ejercicio de los derechos laborales  que se mantuvo  vigente hasta la Ley de Relaciones Laborales de 1976, de forma que hasta esa fecha era  necesaria la autorización marital en los actos jurídicos  o económicos. De ello tenía constancia antes de entrar a la Universidad, aunque no era consciente de la transcendencia de tal hecho.
¿Participaste en los movimientos estudiantiles?
         Pese a lo crítica que siempre he sido, en mi familia había un temor especial hacia la represión franquista. De hecho desde pequeña recuerdo la mirada de un retrato de un familiar de mi padre, al que mataron con el famoso "paseillo". Historias de ese tipo había en todas las familias, pero a nosotros nos impresionaba bastante. De hecho hay una carta , que guardan mis hermanas escrita a mi padre unas horas antes de morir, cuando ya sabía que lo iban a matar.
 Es por ello por lo que mi familia se encargó de advertirme de que huyera de las huelgas y manifestaciones. Aún así alguna que otra cayó.
  Recuerdo que en el año 76 hubo una revuelta muy importante entre los estudiantes, cuando mataron a Bartolomé García Lorenzo en Somosierra  ,  un joven estudiante de 21 años, militante del MPAIAC.  Seis policías, de paisano, que al parecer, según contaba la gente  se colocaron de dos en dos en la escalera de la casa del chico, lo cosieron a balazos  (hablaban de 30 impactos de bala) cuando abrió la puerta. Aún así tardó dos días en morir.  La gente se mostraba indignada por la extralimitación de fuerzas que había hecho la policía.
     También me viene a la memoria un día en el que las revueltas estudiantiles hicieron que la policía nos impidiera incluso el acceso a nuestra casa (vivíamos enfrente de la policía de La Laguna) . Mi hermano protestaba frente a los policías que no atendían a razones y encarándose con uno de ellos le dijo que le disparara si tenía valor. Fue un momento de máxima tensión, porque fácilmente el policía armado podría haberlo  hecho con toda impunidad, todavía en aquella época.  Al final nos dejaron pasar.
¿Cómo viviste el día en que murió Franco?
        Yo estaba en el Instituto, en Tenerife, tenía quince años.  Y sorprendentemente en Canarias, aquel día había escarcha en las aceras, de una pequeña granizada que hubo ese día. Como mi padre había sufrido en su familia la represión franquista, para mí, la noticia supuso una liberación y la esperanza de que mi mundo cambiara a partir de ese momento. En general la sensación de todos los chicos de mi clase es que terminaba una etapa y se abría otra con mayores esperanzas de libertad y de futuro.
        Desgraciadamente no cumplí los 18 años a tiempo para votar en las primeras elecciones  que tuvieron lugar en el año 77, pero si lo hice en las siguiente legislatura.
        Recuerdo, sin embargo, la euforia de la gente, y la simpatía que desprendían muchas amigas de mi madre por Suárez, que finalmente ganaría las elecciones.  Mi madre por el contrario,  adoraba a Felipe González, solía decir "Felipe manque pierda" emulando a la frase del Betis.  No sé si por convencimiento  o para fastidiar a mi madre, mi padre votaba  a Carrillo ,  aunque el siempre decía que era anarquista.  Lo que si se, es que la muerte de Franco en mi entorno no fue una mala noticia.